- Esto debe ser el destino- dicen los dos.
¿Destino o casualidad?
Si creemos en el destino, entonces ¿para qué hacemos nada, si ya está todo predeterminado? ¿Es que simplemente somos marionetas sin ninguna capacidad de decisión sobre nuestra vida? ¿Estamos en manos de algo tan incierto como el azar, el destino, como queramos llamarlo?

¿O es que simplemente la vida está hecha de casualidades? Muchas coincidencia en algún caso podemos decir, pero solamente eso, coincidencia. Las mismas coincidencias que hacen que conozcamos a unas personas y no a otras. ¿Es todo por azar o verdaderamente está fijado de antemano nuestro recorrido por la vida?
Personalmente nunca he creído mucho en el destino pero tampoco tengo ningún argumento ni para estar a favor ni en contra. Si estuviese a favor sería únicamente porque el creer en el destino de alguna manera me relaja; el pensar en que mis decisiones no van a condicionar nada porque todo está supuestamente escrito en un libro invisible a mis ojos me tranquiliza, me permite escapar del sentimiento de culpabilidad de las decisiones "supuestamente" mal tomadas (este tema ya me rayará otro día).
Desgraciadamente me inclino más a pensar que nuestra trayectoria la definimos día tras día.
¿Desgraciadamente?
¿O por suerte?